
El patio reformado de una casa tradicional francesa usa nuestro suelo Girasol 30
El estudio Montjeu Architectures ha usado uno de nuestros diseños para un patio reformado en Autun, Borgoña
“Quién pudiera vivir en esta casa solariega de la Borgoña francesa”, se pregunta uno cuando ve las fotos de este proyecto de ensueño. Quién vive ahí no sabemos, pero sí que el estudio Montjeu Architectures firma la reforma, para la que ha usado en un diseño exclusivo nuestro Girasol 30 para el patio reformado. El resultado es un espacio arrebatador, en donde el suelo es el protagonista absoluto sin destacar de forma histriónica o discordante.
Tal y como explican las reformadoras en su página web, parte de su objetivo como profesionales es tanto atender a las necesidades expresadas por los clientes, como anticiparse a aquellas que todavía no han surgido pero surgirán, o a aquellas que aún no han sido identificadas, pero cuya identificación es cuestión de tiempo. Como tal, el proyecto de esta reforma, que comprende la cocina y el patio, prioriza los espacios abiertos y cómodos, que puedan sostener la vida de una familia a lo largo de las décadas.
El patio, con acceso directo desde la cocina, está flanqueado por una sección de la antigua muralla de la ciudad en la parte norte. La fachada de la casa cubre toda la arista este, y enfrente una barandilla asegura la cornisa, dejando en el centro espacio para la pequeña escalinata de metal que desciende hacia el jardín. En el extremo sur, una pequeña plataforma, también con nuestros ladrillos rectangulares, conecta el patio con otro jardín al mismo nivel, y con unas escaleras de piedra, que seguramente datan de la construcción original, y que suben y bajan a los demás niveles exteriores.
El barro en espacios abiertos como un patio reformado
A veces un material cautiva nuestra imaginación, pero al investigarlo descubrimos que sus características limitan mucho las posibilidades de su uso. Para la reforma de un patio queremos contar con materiales no sólo sostenibles y duraderos, sino que puedan aguantar el estrés al que van a estar naturalmente sometidos.
Hemos de pensar en condiciones de humedad, temperatura y exposición al sol. En la región donde se encuentra este patio, por ejemplo, se superan con frecuencia las temperaturas bajo cero en invierno. En verano las temperaturas máximas se suelen situar en torno a los 20ºC, pero con las olas de calor que asolan Europa últimamente (y que solo van a aumentar en intensidad y frecuencia), en los últimos años se han traspasado con frecuencia los 30ºC. Además de estos cambios drásticos de temperatura entre el invierno y el verano, la cubierta está expuesta a la lluvia, el granizo, las tormentas eléctricas y cualquier otro fenómeno meteorológico.
El barro cocido se lleva usando para exteriores desde hace siglos, y el motivo principal es su capacidad de soportar todos estos factores con una integridad excepcional. Teniendo en cuenta las condiciones en las que viven los suelos exteriores, los de barro cocido requieren unos niveles de mantenimiento mínimos.
Un diseño personalizado
Para este patio reformado, Montjeu Architectures ha elegido nuestro diseño Girasol 30, pero lo hemos adaptado para que esté dispuesto en círculos concéntricos que cargan de identidad al espacio. Se han alternado, para los distintos anillos, las tonalidades Blanco Antiguo y Pizarra.
Fotografías de Amandine Giloux

