¿Qué son las medidas compensatorias?
Exploramos un concepto que será cada vez más común en nuestro vocabulario corporativo: ¿qué son las medidas compensatorias?
Por definición, una medida compensatoria es aquella acción que busca restaurar o reparar los efectos medioambientales negativos de una actividad, normalmente comercial. Cuando se han intentado evitar dichos efectos negativos y no se ha conseguido, todo lo que hagamos para reparar se entiende como medidas compensatorias.
Normalmente, las medidas compensatorias no pueden reparar directamente el daño causado. Lo que se hace necesario, en esos casos, es generar un impacto positivo en el medio ambiente o en el ecosistema dañado que mitigue las consecuencias de dicho daño.
Las medidas compensatorias son parte intrínseca en un modelo de empresa sostenible
Un ejemplo de aquello que la actividad industrial no puede evitar son las emisiones de carbono. Una vez que estas son liberadas a la atmósfera, es imposible reparar o incluso calcular las consecuencias exactas que esas emisiones específicas van a tener. Sin embargo, se pueden poner en marcha mecanismos que contribuyan al secuestro de carbono de la atmósfera. Estos comprenden, por ejemplo, la plantación de especies de alta eficiencia en el secuestro de CO2.
Hace unos años, en colaboración con la Cátedra de Cambio Climático de la Universidad de Málaga (con la que seguimos colaborando estrechamente a día de hoy), pusimos en marcha un proyecto de medida compensatoria que tiene un impacto multidireccional: la Isla de Biodiversidad Alboránica. Se trata de un modelo experimental que aprovecha al máximo las posibilidades que la naturaleza nos brinda para la restauración del medio ambiente, en este caso, secuestro de CO2, la provisión de hábitat para especies autóctonas, la filtración de cursos de agua, retención de suelo…
En todobarro incorporamos las medidas compensatorias en nuestra realidad física
Hay muchas formas de relacionarse con las medidas compensatorias. Algunas empresas que no tienen localización física y sólo existen en el plano digital, eligen tercerizar sus medidas compensatorias a entidades especializadas o a expertos que lo hagan por ellos.
Sin embargo, nosotros tenemos la opción de ser realmente proactivos, y podemos tomar medidas permanentes que continuarán mejorando el medio en el que se desarrollan. Una de ellas, como hemos dicho, es la Isla de Biodiversidad Alboránica, que ocupa todo un talud del tejar de todobarro. Pero también hemos llevado a cabo todo un trabajo de recuperación ecológica en una hectárea de terreno donde ahora prospera toda una biodiversidad autóctona que se había quedado sin un sitio seguro que habitar por culpa de la actividad industrial de la zona. No se usa ningún producto químico, (según la filosofía de Soluciones Basadas en la Naturaleza) y hemos vuelto a ver poblaciones sanas de zorros, tejones, y otras especies nativas.
Un ejercicio de creatividad: las Soluciones Basadas en la Naturaleza son el futuro
En todobarro nos regimos por un principio ambicioso: que es posible sostener un modelo empresarial que tenga un impacto positivo en el mundo que lo rodea. Tal y como nos explicaba Pedro Rosa en esta entrevista, la sostenibilidad requiere más creatividad que recursos económicos.
Lo cierto es que cada vez hay más personas dedicadas a investigación e innovación de medidas y acciones destinadas a la adaptación y mitigación del cambio climático. La apuesta de todobarro es la inversión de nuestros recursos en añadir ese expertise y savoir faire a nuestra cartera de habilidades. La sostenibilidad forma parte de nuestro ADN en la misma medida que lo hacen el diseño, la artesanía o la calidad de servicio a nuestros clientes.
Tenemos la suerte de trabajar con un producto que está íntimamente relacionado con conceptos que el mundo necesita hoy en día: el bioclimatismo, la economía circular, el ecodiseño… Por eso, los proyectos que elegimos y que desarrollamos tienen esas cualidades en su propio diseño. Es el caso del proyecto del Puerto de Sevilla, en el que reutilizamos los lodos del dragado rutinario del río para la investigación y el desarrollo de bloques de tierra comprimida que nos sirvan para pavimentar el propio territorio portuario desde un eco-tejar in situ.
Tenemos entre manos otros proyectos emocionantes que se encuentran en fase de desarrollo y de los que iremos hablando en este blog y en nuestras redes, pero podemos adelantar que tienen en el centro la sostenibilidad, la recuperación y la eficiencia energética. ¿Se puede hablar de medidas compensatorias cuando es la propia producción de una empresa la que mejora el entorno en el que se desarrolla? Probablemente, no. Pero desdibujar la línea es un reto que nos emociona.